jueves, 6 de marzo de 2008

9 por un lado, 6 por el otro.

Desde un comienzo, una de las cosas que más me asustan de este proyecto es el hecho de estar solo en escena. Fantasía de no tener de quien sostenerme cuando me este yendo quizás, pero también pienso que lo mejor de actuar es hacerlo con otro.
Ahora estoy ensayando 2 obras, muy distintas entre ellas. En una somos 9 actores y en la otra 6 (bailarines en este caso, o actores bailarines, como quieran llamarlos). Hay un punto de contacto entre las dos, algo que las une en una problemática, que creo, las emparenta con muchas otras obras en las cuales haya más de dos interpretes: congeniar un horario de ensayo.
Esto quiere decir organizar una grilla en la que todos los integrantes del elenco estén presentes en los ensayos. Quizás en alguna etapa del proyecto pueda ensayarse de forma parcial, pero llega el momento en el que todo tiene que ensamblarse.
Pero ni siquiera es ese el problema creo.
Quizás otro punto de unión entre las obras sea que están creadas a partir de los interpretes, entonces el problema anterior me parece aún mayor. Cómo se logra ese entramado que hace que una pieza sea justamente eso: una sola pieza? Y no un rejunte de pedazos pegados.
Tal vez escribo todo esto por que en un mes se estrena una , y en dos meses la otra, y se acerca el pánico.
Pero lo real es que las obras se resienten.
Una especie de responsabilidad de la creación: uno puede hacer que la obra lo espere a uno en un primer momento, y entonces maneja sus tiempos. Pero esto solo puede suceder antes de que la obra empiece a ser, a cobrar vida propia. No hablo del estreno, sino del momento en el que es la obra la que tiene la necesidad. Y entonces tendría que ser ella la que manda. Si uno no escucha ese momento, algo comienza a resentirse. O simplemente la obra no será aquello que podría haber sido con los cuidados necesarios, y será otra cosa. También puede estar "bien" esa otra cosa que termina siendo (en definitiva es lo único que pudo ser) Pero no será en toda su potencia.
Y por que es tan difícil congeniar horarios? Por que todos estamos en mil cosas, y no somos capaces de priorizar. Y por que queremos todo. Así somos los actores. Cuantos trabajos son aceptados por dinero? cuantos por interés? De que índole es ese interés? artístico? ego? estar haciendo "algo"? yo que sé...
En abril empiezo a ensayar una donde somos 12...
Cada día me asusta más la cabeza esquizofrénica del actor. Por que hay actores distintos, en estas dos obras somos muy distintos todos, algunos más, algunos menos. Pero hay un lugar en el que somos iguales: no nos podemos encontrar.

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